lunes, 25 de mayo de 2015

La cultura de la negación Por Luis Gregorich

                       A mediados de los 80 Luis Gregorich escribía esta nota que comenzaba así :

  ...Lo peor del lavado de cerebro, es que tarda mucho en secar...

               
                      La cultura de la negación Por Luis Gregorich 


´´Lo que no se puede decir, no se debe decir´´, observaba Mariano José de Larra hace más de un siglo y medio, aludiendo irónicamente a la reglamentación de la censura de prensa en la España de su tiempo. En muchas sociedades primitivas, los tabúes son innombrables : lo que está prohibido no debe ser expresado mediante la palabra .
El Chile de Pinochet, más cerca de nosotros, ha suprimido del léxico oficial del vocablo ´´obrero´´ porque, de por  sí, implica una referencia a la ´´Lucha de clases´´ , que quizás empiece a ser superada y  borrada a partir de esta tachadura en el lenguaje.

En la reciente Argentina, esta sencilla y al parecer eficaz  operación negadora se practica en todos los días. A fines de julio, en una reunión de la UNESCO realizada en México, nuestro delegado, el doctor Julio Cesar Gancedo-- que además de ser secretario de Cultura es el  autentico modelo del funcionario cultural auspiciado por el gobierno militar;  solemne , locuaz, reglamentarista, amigo de las comisiones de ´´notables´´, ´´serio´´. pero absolutamente inefectivo y virgen de toda realización concreta-, la utilizo con energía. Si los cables de las agencias internacionales no mienten, Gancedo dijo, en una conferencia de prensa, que en la Argentina ´´  imperaba absoluta libertad´´. En seguida, cuando se le preguntó acerca de la suerte de los escritores desaparecidos, declaró ignorar que los hubiera. Un periodista se intereso por  la suerte de Haroldo Conti y Rodolfo Walsh, y Gancedo contestó que ´´ no los conocía´´.
Y bien, por qué no, El doctor Gancedo no tiene la obligación de conocer la literatura argentina actual. Tal  vez estemos aquí ante un caso de ignorancia, no de negación. Es probable  que el doctor Gancedo crea que los únicos escritores argentinos son los que escriben en La Nación , y que  nunca haya leído Sudeste, Alrededor de la jaula, La balada  del álamo carolina o  En vida. Tampoco es probable que hayan caído en sus manos Operación Masacre o ¿ quién mató a Rosendo?,  y sí que los considere panfletos documentales que no merecen entrar en el mismo Olimpo que habitan Mujica Lainez, Mallea y  Battistessa.
Son muchas las cosas que el  doctor  Gancedo tiene el derecho a desconocer por ejemplo: ,  el exilio de otro escritores, como David Viñas, Manuel Puig, Hummberto Costantini, Antono Di Benedetto,  Daniel Moyano, Hector Tizon, Pedro  Orgambide, Blas Matamoro. Ni conocerá a otros miles de estudiantes, profesionales, periodistas,obreros ( ! aún podemos usar la palabra!) acerca de cuya suerte nada se sabe en el  país,  ni a los cientos de miles, o millones , que han emigrado en los últimos años.
Aceptemos  que el doctor  Gancedo no haya leído nada de Conti o  Walsh, o que ignore que ambos fueron detenidos por grupos armados que dijeron pertenecer a las fuerzas de seguridad, y que desde entonces no se supo nada más de ellos. Pero  lo que ya es más difícil de aceptar es que el secretario de Cultura niegue, tácitamente, los problemas del área que él debiera administrar y planificar. No, en la Argentina no hay censura, no hay desnacionalizacion,no hay control militar de los medios de difusión , no hay ´´listas negras´´ ( ni las hubo jamás), no hay un avasalllante predominio de la frivolidad y del escapismo.
Y hay todavía una manera ´´positiva´´ que el doctor Gancedo tiene de negar los problemas :  hablando obsesivamente de ellos y diciendo que los  va a resolver  , pero no resolviendonos nunca,. ¿ O es que no hemos tenido novedades importantes sobre la Bibloteca Nacional, la ley del libro, el instituto de cine, o el ente de calificación.
Por supuesto, e doctor Gancedo  no es el único negador de la Argentina. En la primera semana de agosto, un grupo de altos  jefes de  policiales dela provincia de Buenos Aires, según lo consignan los diarios, dieron  una conferencia de prensa sobre el grave auge de la delincuencia que se estaba registrando en el llamado ´´conurbano´´. De acuerdo con la información Clarin , el titular de la Unión Regional La Plata, al ser interrogado sobre las causas del incremento que él mismo había señalado en la tasa de delitos, dijo que los factores eran muchos y que  no se podían formular conclusiones ,  aunque -- sostuvo ´´ al menos en mi jurisdicción puedo afirmar que  no tenemos desocupados cometiendo delitos´´. Inmediatamente, el subdirector de Seguridad

...Entrar en la posteridad es fácil, lo difícil es salir...

señaló que ´´esta ola de robos no tiene relación con el tema de la desocupación , ya que la totalidad de los detenidos por estos hechos registran antecedentes policiales y penales´´
! Que tranquilizadoras declaraciones! Nada que ver, entonces ,  entre la difícil situación social ( de la que la desocupación es la manifestación mas cruda) y el vertiginoso crecimiento del robo y la criminalidad en las zonas más afectadas por esa crisis.
¿Cuales son las encuestas sociológicas que la policía llevó a cabo para adoptar una afirmación tan tajante? Y después, ¿ Cual es el  método que la policía aplica para saber así , en forma taxativa, que en La Plata no hay , en este momento, ´´ desocupados conteniendo delitos´´? Es probable que haya miles o decenas de miles de individuos que estén sin trabajo en la capital de la provincia, y no se entiende bien cómo la policía puede controlarlos a todos, día y noche.
¿ O estamos todos equivocados y en realidad el desocupado es un ciudadano modelo, paciente y educado, que espera que las dificultades de su familia se resuelvan por si mismas,  y  que concurre, en sus horas de ocio forzado, a la biblioteca nacional mas cercana?
Aunque ninguno de los detenidos por  robo u  otros delitos de las últimas semanas fuera un obrero desocupado, y se tratara , por el contrario, en todos los  casos, de delincuentes profesionales, igualmente el tema no podría examinarse con tanta desaprensión y, de nuevo, con tanto afán negador, motivado obviamente por un deseo político de sustraer, de la responsabilidad indirecta del incremento de la delincuencia, a los que  tienen la responsabilidad directa de la crisis económica.  En cualquier parte del  mundo existen vínculos estrechos, y no podría ser de otro modo, entre la desocupación, la miseria, la escasez y la frustración personal,  por un lado, y el aumento de las tasas de delitos,  por  el otro. El ámbito de escepticismo y desesperanza que construyen grandes crisis no puede ser ajeno a la profileracion de robos y crímenes , sea quien sea el  que los  cometa.Por  supuesto, el gran tema de la negación nacional´-casi está de más decirlo- es el de los desaparecidos , durante la guerra civil que sacudió al país  en la segunda mitad de  la década del 70. El presidente Bignone declaró hace poco, al  igual que todos sus predecesores, que resultaba imposible dar una lista de desaparecidos, simplemente porque no existía tal lista y no se sabía si tales desaparecidos habían muerto, o se habían ido  al exterior, o habían pasado a la clandestinidad.
Seguramente, contestar a estos que la mayoría  , la inmensa mayoría de los desaparecidos fueron secuestrados por autodenominadas fuerzas de seguridad ) y  que muy verosímilmente lo  eran), no tiene valor  alguno: en instinto de negación es demasiado fuerte y no admite matices. Los obsesivos negadores en este caso los gobernantes militares parecen no percibir que  su radical actitud cierra el camino a una reconciliación de la comunidad, que sólo puede darse en el marco de la aceptación de la verdad ( Lo cual no significa detenerse en macabras y minuciosas reconstrucciones, que ellas si - pueden convertirse en obstáculos en el camino hacia la  democracia) ¿ Acaso el horror de lo  que paso es tal que no puede ser nombrado? No, nunca lo que hacen los hombres  es tan grave que no pueda merecer la catarsis, la lucidez, el arrepentimiento de la palabra, y ni siquiera el espanto de la guerra debería transformar a los argentinos del  siglo veinte en negadores  psicóticos, a la manera tribal, de sus males.
! Y como referirse a los  negadores y a la negación en los medios  masivos, y sobre todo en la televisión!
Se ha analizado muchas veces el  contenido de nuestros novelones televisivos :  allí también anida la esperanza de que el divorcio, el adulterio la homosexualidad dejen de existir por  el  simple de  recurso de no ser mencionados. A lo sumo podrá encontrárselos, sugeridos o  directamente pronunciados, en algunas series extranjeras que , por supuesto,  gozan de relativa impunidad porque transcurren lejos de nuestras fronteras y, según la inocente opinión de nuestros censores, no pueden ejercer influencia alguna en las costumbre locales.
No se hable siquiera de la negación sistemática practicada en los programas periodísticos de la totalidad de  los  canales , en los que sólo en las ultimas semanas empieza a asomar cierta tímida tendencia a la apertura , asumida sin mayor convicción ( como que  sus  ejecutores son los  mismos  que  condujeron la orientación opuesta en el sexenio pasado) y aún sembrada de trampas y vicios autoritarios.
Al  plantear la uniformidad de pensamiento, al limitarse a traducir los puntos de vista oficiales sobre todos los  asuntos, al convertirse en meros intermediarios , aceitados y corteses, entre los  funcionarios y  los desguarnecidos televidentes, estos programas y sus lamentables adalides negaron , tácitamente , las alternativas , el disenso, la pluralidad de las opciones, la posibilidad  de una verdad compartida. Todo lo que se consideraba enemigo debía ser acallado o convertido en sinónimo de perversión y escarnio. El resultado está a la vista: grandes sectores de la población que no han sido persuadidos por  la  ideología oficial, pero que , desgraciadamente, han caído en un inevitable escepticismo y en una perplejidad que no podrá menos que gravitar en la futura vida política.
Tristes son los  tiempos en que  como dice Brecht, ´´ la palabra sincera es imprudente´´  y  en que ´´ una conversación sobre árboles es casi un crimen ´´, porque , ´´ encierra un silencio acerca de tantas fechorías´´.
El mundo de la negación es, qué duda cabe, un mundo más cómodo y menos riesgoso, pero no ha de abrir jamas las puertas dela fraternidad y de la alegría. En vez de seguir negando que  Conti y Walsh existieron alguna vez y  fueron importantes y que después fueron secuestrados y casi con certeza muertos, en vez de negar que otro tanto ocurrió a millares de personas, en vez de negar que los trastornos sociales se deben a la torpeza de los gobernantes, en vez de negar las verdades ajenas para imponer una miserable y chiquitita verdad propia, es hora de devolver a las palabras su resonancia y su fuerza.
Renunciar a la negación histérica de todo  lo  que es hostil, de todo lo que nos inquieta y asusta, es un gesto difícil y valiente , pero vale la pena intentarlo.  Hay que decir celo al doctor Gancedo y a los funcionarios que empiezan a emprender la retirad sin abandonar la confortable, sedante actitud negadora.

miércoles, 13 de mayo de 2015

Derecho Politico Por Carlos S. Fayt



 Víctor Vishniakov

Carlos S. Fayt : Tomo 1


1.La Política es la actividad humana destinada a ordenar jurídicamente la vida social humana. De ella deriva el gobierno de los hombres en la comunidad organizada y consiste en acciones ejecutadas con intención de influir, obtener, conservar, crear, extinguir o modificar el Poder, la organización o el ordenamiento de la comunidad.Como toda acción voluntaria del hombre, la actividad política proyecta, cristaliza en hechos una conducta, un determinado comportamiento. Pero esa conducta o comportamiento no tiene sentido individual El acto político es una exterioridad de sentido, un acto de la vida social. La realidad política es realidad humana. Es vida y modo de vivir, de crear estructuras, de perfeccionar la convivencia dentro de la comunidad humana. De ahí que el hombre sea, en su propia realidad,un ser político.La vida humana se despliega en actos de vivencia y convivencia.Las realizaciones humanas, su evolución espiritual y las formaciones sociales a que da vigencia con su comportamiento actual, constituyen los dominios de la cultura, de la historia y de la realidad social. Lo realizado por el hombre, el conjunto de avances materiales y morales,científicos y artísticos, que como un legado se transmiten las generaciones, constituyen la realidad cultural. La realidad social es vida humana desplegada en actos de convivencia, en formas de relación humana dentro de los grupos sociales.

2. La realidad política es un sector de la realidad social, como vida humana, que se traduce en acciones y formas vinculadas al Poder.Se manifiesta como lucha, como arte de gobierno y como empresa comunitaria, que constituyen fases o momentos de un mismo proceso circular. Esos tres momentos, a los que también se denominan fazagonal, faz arquitectónica y faz plenaria, usando un criterio que pertenece a Aristóteles, se corresponden, la primera, con la conquista y la conservación del poder; la segunda, con el ejercicio del poder; y la tercera, con el recíproco entrelazamiento de las dos primeras más un alto grado de consenso. La realidad política es variable y polifacética.Incluso simbólica teniendo en cuenta que en la base de todo sistema político se encuentra, como lo señala Burdeau, un "universo de representaciones, de creencias y de apariencias". En ese universo "no hay nada que no haya sido elaborado, interpretado, recreado por el pensamiento, por el deseo o por la fe de los hombres". La esencia de la Política es el Poder. La política es acción, actividad, obrar actualizado que cristaliza en normas jurídicas e instituciones que condicionan el Poder, lo vivifican, lo envuelven, lo amplían o lo reducen, en tanto el poder es el objeto de esa actividad, ya se lo conciba como una libre energía (Hauriou), una voluntad (Jellinek), la energía de una idea de Derecho (Burdeau), o el resultado de la relación entre mando y obediencia. El Poder, es pues, el centro de las acciones políticas. Podrá concebirse esas acciones como antagonismo, lucha o disyunción; o bien como paz, equilibrio y armonía. Podrá considerárselas manifestaciones o simples reflejos de los móviles económicos buscando relacionarlas con la producción; desprovistas de toda motivación económica. Tales consideraciones no altera la esencia de la actividad política frente a otras formas de la actividad humana. Simplemente indican los motivos culturales y naturales, que, como en toda acción social, pueden encontrarse insertos en la acción política, señalan los elementos antecedentes,o las causas determinantes, o la finalidad consecuente. Esa referencia directa de la Política con el Poder, permite diferenciar los actos políticos de los actos sociales y económicos. Así como el acto político se caracteriza por estar referido al Poder, el acto social está referido a la interacción humana o convivencia y el económico a la producción ,circulación y distribución de la riqueza.

3. Por referirse al Poder, la Política se refiere al Estado, que es una forma del poder político. Según Burdeau, el Estado es "una ordenación del poder político, de acuerdo con el orden social que los hombres pretenden hacer prevalecer" {'). Es decir, la institución en que se en cama el poder político.A este respecto, en su sentido genérico, la Política se vincula a todo tipo de poder organizado, no solamente al estatal. En cada formación social, v. g., la familia, un gremio, una empresa económica, una asociación de intereses, una entidad social, una organización militar, se genera una relación de poder entre los que adoptan disposiciones, entre quienes deciden y quienes obedecen esas decisiones. Podrá estar esa relación estructurada o no exteriormente con el prestigio de la autoridad, la función o el cargo; tomar la forma de directorio, comisión directiva, comité ejecutivo, comando o simplemente la de ubicación del sujeto dentro del grupo, como la del padre o de la madre dentro del medio familiar. Lo cierto es que como los hombres deben en todo momento decidir lo que deben hacer frente a situaciones y circunstancias determinadas, de la interrelación de dos o más voluntades surge la decisión como imposición de una voluntad sobre las otras. Esa relación que encontramos en todos los órdenes de la actividad social humana,entre quienes dirigen y quienes son dirigidos; relación intrínseca demando y obediencia, de autoridad y consentimiento, es la fuente del poder, como capacidad para orientar las acciones, como energía que se encarna en actos, como una voluntad que se impone a las demás, para la ordenada realización de un fin. No hay organización sin orden, ni orden sin una dirección. La capacidad de imponerse en la conducta delos miembros de la organización, la actividad que se realice vinculada a esa facultad es genéricamente actividad política. Y así, no resulta impropio hablar de una política económica, o política sindical,política eclesiástica, en cuanto a la actividad orientada a obtener, conservar o modificar los puestos de mando y dirección dentro de las "entidades,asociaciones o formaciones sociales en general.En su sentido específico, la política se vincula directamente al poder de dominación de la comunidad, al poder estatal Las organizaciones económicas, laborales, militares, sociales, tienen poder organizado, pero ese poder se encuentra limitado al ámbito del grupo que forma parte de la organización; su efectividad condicionada a que sus miembros continúen o no voluntariamente prestándoles consentimiento adhesión y a que, en última instancia, el poder de la organización pueda realmente ser obedecido.El Poder estatal, o en sentido estricto, el Poder político, se caracteriza como irresistible, sobre todo el ámbito espacial y personal de la comunidad, con capacidad para imponer coactiva y obligatoriamente sus decisiones, contando con la fuerza material suficiente para asegurar su dominio mediante la coacción. De ahí que se haya caracterizado al Estado como poder de dominación, relacionando los dos momentos dialécticos de puro dominio y pura coacción que forman el substractum del auténtico poder estatal.

4. Etimológicamente la palabra "política" proviene de ''polis",la ciudad-estado griega, a la que Aristóteles define como la asociación de varias aldeas o poblados que posee todos los medios para bastarse así misma, alcanzando el fin para que fue formada , siendo la más importante de las asociaciones, puesto que comprende en sí a todas las demás. En el pensamiento de Aristóteles, el hombre es un ser político por naturaleza, que debe vivir bajo la ley (nomos). Para no vivir en sociedad debería ser un Dios o una bestia,es decir, fuera de la humanidad, en condiciones suprahumanas o infrahumanas.

Carlos S. Fayt




jueves, 7 de mayo de 2015

Para inventar el mundo cada día



Eduardo Germán María Hughes Galeano, conocido como Eduardo Galeano, fue un periodista y escritor destacado de la literatura latinoamericana .(Montevideo, Uruguay, 3 de septiembre de 1940 - ib., 13 de abril de 2015), 


Para inventar el mundo cada día 

Charlamos,comemos,fumamos,caminamos,trabajamos juntos,maneras de hacer el amor sin entrarse, y los cuerpos se van llamando mientras viaja el día hacia a la noche. 
Escuchamos el paso del último tren. Campanadas de la iglesia. Es medianoche. 
Nuestro trencito propio se desliza y vuela, anda que te anda por los aires y los mundos, y después viene a la mañana y el aroma anuncia el café sabroso, humoso,recién hecho. Se te sale por la cara una luz limpia y el cuerpo te huele a mojadumbres. 
Empieza el día. 
Contamos las horas que nos separan de la noche que viene. Entonces nos haremos el amor, tristecidio. 

Buenos Aires : Largo viaje sin movernos 

Ritmo de pulmones de la ciudad que duerme. Afuera hace frío. 
De pronto, un estrépito atraviesa la ventana cerrada. Me hundís las uñas en el brazo.No respiro. Escuchamos un barullo de golpes y puteadas y el largo aullido de una voz humana. 
Después,silencio. 
-¿No te peso?- 
Nudo marinero. 
Hermosuras y dormideces más poderosas que el miedo. 
Cuando entra el sol, parpadeo y me desperezo con cuatro brazos.Nadie sabe quién es el dueño de esta rodilla, ni de quién es este codo o este pie, esta voz que murmura buen día. 
Entonces el animal de dos cabezas piensa o dice o quisiera: 
--A gente que se despierta así, no puede pesarle nada malo. 

La pequeña muerte 
No nos da risa el amor cuando llega a los más hondo de su viaje, a lo más alto de su vuelo : en lo más hondo, en lo más alto, nos arranca gemidos y quejidos, voces del dolor, aunque sea jubiloso dolor, lo que pensándolo bien nada tiene de raro, porque nacer es una alegría que duele. 
Pequeña muerte, llaman en Francia a la culminación del abrazo, que rompiéndonos nos junta y perdiéndonos nos encuentra y acabándonos nos empieza. Pequeña muerte, la llaman; pero grande, muy grande ha de ser, si matándonos nos nace. 

Buenos Aires: Alfonsina 

A la mujer que piensa se le secan los ovarios. Nace la mujer para producir leche y lágrimas, no ideas; y no para vivir la vida sino para espiarla desde las ventanas a medio cerrar. Mil veces se lo han explicado y Alfonsina Storni nunca lo creyó. Sus versos más difundidos protestan contra el macho enjaulador. 
Cuando hace años llegó a Buenos Aires desde provincias, Alfonsina traía unos viejos zapatos de tacones torcidos y en el vientre un hijo sin padre legal.En esta ciudad trabajó en lo que hubiera; y robaba formularios del telégrafo para escribir sus tristezas.Mientras pulía las palabras, verso a verso, noche a noche, cruzaba los dedos y besaba las barajas que anunciaban viajes y herencias y amores. 
El tiempo ha pasado , casi un cuarto de siglo; y nada le regaló su suerte. 
Pero peleando a brazo partido Alfonsina ha sido capaz de abrirse paso en el masculino mundo. Su cara de ratona traviesa nunca falta en los fotos que congregan a los escritores argentinos más ilustres. 
Este año, en el verano,supo que tenía cáncer. Desde entonces escribe poemas que hablan del abrazo de la mar y de la casa que la espera allá en el fondo , en la avenida madréporas. 

Mujer que dice chau 

Me llevo un paquete vacío y arrugado de cigarrillos Republicana y una revista vieja que dejaste aquí. Me llevo los dos boletos últimos del ferrocarril.Me llevo una servilleta de papel con una cara mía que habías dibujado, de mi boca sale un globito con palabras, las palabras dicen cosas cómicas. También llevo una hoja de acacia recogida en la calle, la otra noche, cuando caminábamos separados por la gente. Y otra hoja, petrificada, blanca, que tiene un agujerito como una ventana, y la ventana estaba velada por el agua y yo soplé y te vi y ése fue el día en que empezó la suerte. 
Me llevo el gusto del vino en la boca. ( Por todas las cosas buenas, decíamos, todas las cosas cada vez mejores , que nos van a pasar). 
No me llevo ni una sola gota de veneno. Me llevo los besos cuando te ibas) no estaba nunca dormida, nunca) . Y un asombro por todo esto que ninguna carta, ninguna explicación, pueden decir a nadie lo que ha sido.